PROMOCIÓN 2018: PRESENTAMOS A LOS NUEVOS LÍDERES

Uno debería graduarse todos los días. El ambiente que  se respira   es  totalmente diferente:  se siente   la satisfacción del deber cumplido, la nostalgia  de la partida,  la ansiedad por  la nueva etapa  que se inicia y la reunión de todas las  personas que siempre han estado   apoyándonos en nuestros sueños y  acolitando  nuestros defectos.

Fueron  11 años  los  que  necesitamos para  estar allí  al frente de todos nuestros familiares, luciendo  uno de los uniformes más esperados de la vida: la toga. A punto de  cambiar   la dirección del birrete que  me convertirá en nuevo  graduado de la I.E. José Manuel Saavedra Galindo.  Hoy   estoy reunido  con  mis padres, el Rector y la Coordinadora, pero no  se trata de un sanción académica, sino del  mejor  de los encuentros: recibir mi título de   bachiller  académico.

Al lado de nosotros los graduandos , dos de nuestras maestras, quienes se  han ganado  el cariño y respeto de todos  por su dedicación, paciencia y esa disposición para  regalarnos  un consejo  oportuno. Hoy   el nudo  en la garganta también se debe a que empezaremos    otra etapa de la vida ya sin ellos , a quienes   tuvimos  tan cerca  y solo ahora lo notamos.

Adiós a mi colegio. En sus aulas se quedan  muchos  de los mejores momentos que  cualquier joven puede  tener en compañía de amigos  y compañeros que  se convirtieron en casi hermanos.  A todos  mis maestros, los dejo temporalmente porque  espero que Dios y el tiempo nos  permitan regresar para mostrarles que sus enseñanzas no fueron  en vano. Creo  que hablo por todos  mis compañeros  cuando  aseguro que volveremos  a nuestra segunda casa.

La promoción 2018  se lleva   el  deber de  cumplir nuestros sueños con  los valores que  en nuestras familias nos infundieron, los mismos que  se reforzaron   cuando  llegamos a  una institución  que siempre llevaremos en el corazón.

Hasta pronto, Saavedra Galindo